Un Airbus está a punto de aterrizar en un aeropuerto cercano a una ciudad.
El descenso lo observa a través de su ventana una administrativa que está fotocopiando una demanda.
También dos estudiantes que están a punto de entrar en un establecimiento de lavandería. Y un fotógrafo que está sacando fotos para una empresa de vinos.
Aparentemente no existe conexión entre estas personas. A no ser porque todas son usuarias de un modelo de negocio que tiene un ascenso imparable.
En este artículo te explicaré por que el pago por uso es la alternativa al comprar para tirar.
Una economía en pago por uso
En el caso del Boeing, la aerolínea es la propietaria del avión pero los motores pertenecen a la compañía GE (General Electric), la cual cobra por cada hora que el avión está en el aire.
Las dos personas que entran en la lavandería pagan por el tiempo que ocupan la lavadora o la secadora.
Y, mientras esperan a que esté lista la colada, pueden estar leyendo en un Kindle, el lector de Amazon, el cual paga al autor por el número de páginas leídas más que por el libro completo.
La administrativa que recoge la demanda recién impresa utiliza un equipo que pertenece a una empresa de renting de impresoras que a final de mes pasa una factura por el número de copias que se han impreso.
En cuanto al fotógrafo, es un freelance. Una persona que trabaja por cuenta propia haciendo trabajos esporádicos.
Incluso para él existe una plataforma de pago por uso que introduce flexibilidad en el rígido mercado laboral.
Incluso las personas que hacen trabajos esporádicos deberían tener que sufrir los elevados costes que supone darse de alta como autónomo.
Porque el pago por uso en impresoras favorece la economía circular
Hace una década sufrí la obsolescencia programada en impresoras.
Había instalado en pago por uso ocho impresoras multifunción monocromo de HP.
Una tras otra, las impresoras se fueron averiando en el transcurso de unos pocos meses después de acabarse la garantía del fabricante.
Las averías prematuras dieron al traste con mis expectativas de beneficios. Al fin y al cabo había financiado de mi bolsillo el parque de impresoras.
De esa primera operación de alquiler de impresoras en coste por copia aprendí dos lecciones:
- Elegir modelos y marcas que menos abusen de la obsolescencia programada
- Trabajar con unos pocos modelos de impresoras que fuesen fáciles de reparar para poder rentabilizar el almacén de repuestos.
El renting de impresoras genera menos residuos electrónicos
Lo que me ocurrió en el parque de impresoras del ayuntamiento no es algo insólito.
Muchas veces se nos avería un aparato justo después de pasar el periodo de garantía.
Cada vez estamos más enfangados en la economía de usar y tirar. No porque queramos.
Los precios que nos imponen por las reparaciones nos obligan a ello.
Entre piezas y mano de obra descubrimos que nos cuesta más la reparación que comprar el aparato nuevo.
Lo trágico de la obsolescencia programada es que estamos llenando el planeta de residuos.
Y para nada; muchas veces no cambiamos a productos que sean mejores que los que tiramos.
Con el renting de impresoras las empresas suministradoras seleccionan aquellas que menos tendencia tienen a averiarse.
La rentabilidad suele estar más allá del tiempo que dura la garantía de la impresora.
Esto a su vez aumenta la presión sobre las marcas para que fabriquen productos más duraderos.
El modelo de negocio pago por uso
El renting de coches o el alquiler de impresoras en coste por copia son solo unos ejemplos de como el pago por uso abarata costes y simplifica la gestión de las empresas.
En 2006 Amazon lanzó Amazon Web Services que básicamente alquilaba espacio en sus servidores de internet para empresas y administraciones.
Lo que comenzó como una suscripción por un servicio en la nube, pronto se contagió a las plataformas que comparten coches e incluso bicicletas.
Y no solo es el modelo que utilizan las empresas de alquiler de bicicletas eléctricas en grandes ciudades.
Incluso se está popularizando un modelo mixto para fomentar las ventas de coches eléctricos; el usuario compra el coche pero hace un renting de las costosas baterías.
Ahora el pago por uso se ha extendido por todos los sectores de la economía.
Incluso hay compañías aseguradoras que se plantean cobrar los seguros de coches en función del número de kilómetros que recorren cada mes.
Pago por uso significado
En el pago por uso existe un desembolso económico por el acceso a recursos durante el tiempo que se accede a ellos o por el consumo realizado.
La unidad de pago por uso es un tipo de modelo de pago vinculado a la cantidad o calidad del servicio que recibe el cliente.
Por ejemplo, en el pago por uso de impresoras se cobraría según el número de copias realizadas.
En el modelo de unidad de servicio de pago por uso, el fabricante o minorista del producto suele ser responsable de la instalación, el mantenimiento y la recogida del producto.
Al vincular el precio del servicio al rendimiento, anima al proveedor a ofrecer el mejor servicio a sus clientes.
Los servicios de medición son comunes en los entornos de tecnología de la información (TI) de las empresas.
Con la informática, por ejemplo, una empresa puede disponer de recursos informáticos que se adapten a las necesidades fluctuantes.
Este enfoque es más rentable para la empresa que el mantenimiento de una gran infraestructura que exceda sus necesidades.
El pago por uso funciona bien cuando el servicio puede ser medido efectivamente.
Los sistemas de facturación y los acuerdos deben ser simples de comunicar y fáciles de facturar.
Ventajas de pagar por uso para fabricantes o distribuidores
Los fabricantes de productos pueden transformar su modelo de negocio desde la realización de una sola transacción ( la venta) por cliente, a un contrato de servicio que se mantiene en el tiempo.
Tiene más oportunidades para mejorar el servicio ganarse la fidelidad del cliente.
HP, Brother, Kyocera, Konica Minolta,Lexmark, por citar algunas marcas, incluyen un esquema de pago por uso de impresoras.
El pagar por uso de impresoras
Las impresoras en precio por copia no son algo nuevo..
En la década de 1950, las empresas estadounidenses de fotocopiadoras adoptaron el modelo con éxito.
Mantenían bajos los precios de venta de la fotocopiadora y generaban los beneficios con los papeles especializados que requería el proceso de copiado en húmedo.
Fue el desarrollo de la xerografía -‘escritura seca’ – en 1959 por la compañía Haloid (que pronto cambiaría su nombre a Xerox) lo que causó la verdadera implantación del modelo de pago por uso.
Las fotocopiadoras basadas en el método xerográfico eran muy caras.
Haloid-Xerox las alquiló a empresas con una tarifa de impresión coste por copia.
El modelo de pago por uso impresoras se hizo popular y Xerox dominó el mercado.
Hasta el punto que estuvo en la mirilla de los comités antimonopolio del gobierno federal.
Con el tiempo una nueva revolución tecnológica en el fotocopiado que llegó desde Japón se extendió por todo el país. Y Xerox empezó su largo declive.
Lo que Xerox aportó fué una nueva forma de comercializar un producto.
En lugar de venderlo directamente, lo que hizo fue vender el resultado del funcionamiento del producto.
Pagar por uso en el consumo
Pagar por uso nos resulta familiar como consumidores.
En lugar de pagar varios cientos de euros por un teléfono, pagamos una tarifa de servicio que incluye no solo la amortización del teléfono, sino también el uso de la voz y datos.
También recurrimos al pago por uso cada vez que alquilamos un coche o alquilamos una vivienda vacacional.
Que es la economía circular
La economía circular parte de la idea del diseño de productos que puedan ser utilizados múltiples ciclos de uso.
En lugar de considerar los bienes dañados o no deseados como «desechos», en la economía circular se convierten en materia prima para un nuevo ciclo de producción.
La economía circular es la contraposición de la economía lineal donde un producto de fabrica, se usa y finalmente se desecha.
La economía circular no solo predica una reutilización de los productos una vez que han cumplido un ciclo de vida. También aboga por unos ciclos de vida más extensos.
Y aquí es donde entra el esquema del pago por uso.
Según la Fundación Ellen MacArthur,
«El esquema de pagar por uso transforma una inversión a largo plazo de una máquina en múltiples flujos de caja y el derecho a utilizar la máquina durante un cierto periodo de tiempo. Esto resulta en una situación económica en la que todos salen ganando y produce implicaciones positivas en cuanto a materiales y energía a través de una vida útil prolongada de los productos».
Ejemplos de economía circular
La economía circular está cada vez más ligada al pagar por uso.
El fabricante o distribuidor alarga el ciclo de vida de un producto y luego se hace cargo de su retirada y reciclaje.
El fabricante tiene un incentivo para garantizar el funcionamiento mediante el diseño de productos duraderos cuyas reparaciones sean económicas.
El coste por copia en impresoras es posible gracias en parte a que éstas se pueden conectar a internet y enviar reportes del estado de los consumibles y de los contadores de copias.
La aplicación de la tecnología de Internet de las cosas permite la supervisión de los productos, mientras que el mantenimiento y la renovación de máquinas de mayor calidad preserva la integridad del producto durante más tiempo.
Esto catapultará los servicios de pago por uso en todos los ámbitos.
Cada vez existen más ejemplos de economía circular y pago por uso.
Pagar por uso la lavadora
Si hay un aparato cuyo mantenimiento puede resultar ruinoso es una lavadora.
La reparación suele ser lo suficientemente barata como para que nos planteemos arreglarla.
Y lo suficientemente cara, como para que en dos reparaciones podamos haber llegado al precio de una nueva.
En Holanda crearon empresa especializada en el alquiler en régimen de pago por uso de electrodomésticos.
Bundles no vende o alquila lavadoras. Ofrece ropa limpia en base a pago por lavado.
Su promotor, Marcel Peters trabajaba en una empresa de servicios públicos. Participaba en un proyecto que utilizaba el Internet de las cosas (IoT). Concretamente, trabajaba en un medidor inteligente para monitorear el uso doméstico de energía.
Peters comenzó a darse cuenta de que esta nueva conectividad se podía aplicar a cualquier electrodoméstico para su control remoto y monitorización.
Entre las aplicaciones estaba un horno que puede descargar recetas o un frigorífico que le dice a su propietario que necesita comprar leche.
Esta tecnología innovadora la utilizó para dar forma a un modelo de pago por uso, de forma que permitiera el mantenimiento y la gestión de la vida útil de los electrodomésticos.
Así que, en 2014, Marcel fundó Bundles, una empresa que ofrece ropa limpia de pago por lavado, para que los clientes paguen por el rendimiento, no por el producto.
En algunos aspectos, el proceso es comparable a la compra de un contrato de telefonía móvil.
La lavadora en pago por uso; ejemplo de economía circular
Los clientes visitan el sitio web de Bundles y seleccionan los requisitos de su electrodoméstico y la frecuencia de uso esperada.
En base a estos datos Bundles sugiere una tarifa mensual. Después del pago de un depósito y de la primera cuota mensual, el aparato se instala.
Incluso retiran el electrodoméstico usado del usuario si es necesario.
Una vez que el dispositivo está conectado a Internet, el usuario está listo para empezar.
Después del primer mes, el usuario recibe un resumen de la frecuencia con la que ha utilizado la máquina y puede hacer que su tarifa se ajuste retrospectivamente.
Sin embargo, hay una diferencia importante con respecto al modelo de teléfono móvil; los usuarios pueden terminar su relación con Bundles en cualquier momento.
Aunque Marcel admite que se trata de un coste ligeramente superior para la empresa, considera que es importante recordarle a los clientes que ellos tienen el control. Según el empresario, existe una fuerte aprensión hacia tales modelos de pago por uso. En parte por las malas prácticas de empresas de telefonía.
Como resultado, Bundles ha hecho que la terminación del contrato sea lo más fácil posible.
La tecnología Bundles implica de hecho la «adaptación» de una lavadora estándar disponible en el mercado hoy en día.
Sin embargo, la selección del fabricante ha sido importante.
Según Marcel, Miele es el único fabricante restante que utiliza materiales 100% reutilizables o reciclables.
Si inspeccionas una de las lavadoras de hoy en día de otros fabricantes, encontraras materiales escogidos por su menor costo en lugar de por su durabilidad o reciclabilidad a largo plazo. Por ejemplo, el acero inoxidable se ha intercambiado cada vez más por plásticos, y el hierro fundido por concreto.
La empresa ha conseguido una vida media de 10.000 horas para una máquina de alta calidad hasta 2.500 horas para una unidad de baja calidad. De este modo, cuando un dispositivo vuelve a Bundles, puede repararse o remanufacturarse, listo para el siguiente usuario.
Pagar por uso en nuestra mentalidad
Estamos obsesionados por poseer cosas; casas,televisores,coches,zapatos,etc.
La mayoría de las veces gastamos más dinero del que debemos simplemente para considerarnos dueños de algo. Y esto siempre acaba en decepción.
Una aproximación más práctica y menos agresiva con nuestro entorno es utilizar lo que necesitemos cuando lo necesitemos. Y pagar solo por lo que usamos.
Como dijo el papa Francisco,
«Nadie ha visto un camión de mudanzas detrás de un cortejo fúnebre»
El futuro: una economía verde y circular
No solo es el coste por copia en impresoras. El modelo de negocio de pago por uso está aquí para quedarse. Porque necesitamos una economía verde y circular.
Es de esperar que más servicios busquen esta oportunidad de acceso a un gran mercado a medida que las empresas se vuelven más competitivas y entran en nuevos mercados.
La Comisión Europea ha adoptado un ambicioso paquete de medidas para ayudar a las empresas y los consumidores europeos a realizar la transición hacia una economía más fuerte y circular en la que los recursos se utilicen de manera más sostenible.
Las acciones propuestas contribuirán a «cerrar el ciclo» de los ciclos de vida de los productos a través de un mayor reciclado y reutilización, y aportarán beneficios tanto para el medio ambiente como para la economía.
Los planes extraerán el máximo valor y aprovechamiento de todas las materias primas, productos y residuos, fomentando el ahorro energético y reduciendo las emisiones de Gases de Efecto Invernadero.
Las propuestas cubren todo el ciclo de vida de los productos: desde la producción y el consumo hasta la gestión de residuos y el mercado de materias primas secundarias.
Esta transición contará con el apoyo financiero de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (ESIF), que incluyen 5 500 millones de euros para la gestión de residuos.
Además, se aportarán 650 millones de euros en el marco de Horizonte 2020 (el programa de financiación de la UE para la investigación y la innovación) e inversiones en la economía circular a nivel nacional.
Marchando una oferta de impresora en renting